Alimentación sostenible: qué es y 5 motivos para aconsejarla

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Cuidar el planeta debería ser una de nuestras prioridades vitales. Podemos lograrlo, si ponemos empeño, en todas las facetas de la vida. La alimentación sostenible no iba a ser menos. Es un componente central y esencial en nuestras vidas que no solo nos aporta nutrientes, sino que también juega un papel importante en la economía y la cultura. 

Llevar una alimentación sostenible conlleva beneficios para el medio ambiente y para tu salud. En este artículo te contamos cómo y te damos motivos de peso para que la pongas en práctica.

Alimentación sostenible: ¿qué es?

A pesar de que no existe una definición universal, la Comisión Europea define la alimentación sostenible de la siguiente manera: “En lo relativo a la alimentación, podría considerarse un sistema sostenible aquel que abarca un ámbito de temas como garantía del suministro de alimentos, salud, seguridad, asequibilidad, calidad, una fuerte industria alimentaria y, al mismo tiempo, sostenibilidad ambiental en términos de temas como cambio climático, biodiversidad, calidad del agua y del suelo.”

Para hacerlo más sencillo, se puede resumir con una definición sencilla como la que sigue: una dieta equilibrada y sostenible debe ser adecuada desde el punto de vista personal y, además, a nivel de producción y consumo, generar un menor impacto en el entorno.

Para convertir nuestra dieta en una alimentación sostenible se debe:

• Reducir el impacto negativo sobre el medio ambiente teniendo como base de la ingesta calórica las legumbres, las frutas y las verduras de temporada y con origen local y ecológico.
• Evitar el consumo de alimentos ultraprocesados porque, además de ser perjudiciales para la salud, contribuyen al deterioro de las fuentes de recursos naturales y materias primas. Estos productos dejan una gran huella de carbono en su proceso de elaboración. La premisa fundamental es comprar alimentos lo menos procesados posibles.
• La agricultura debe ser ecológica y orgánica, así como un consumo sostenible y responsable.

¿Qué es la alimentación sostenible y cuáles son sus beneficios?

Lograremos una alimentación sostenible y equilibrada si nuestra dieta no pone en riesgo nuestra salud ni la del planeta. No debemos contribuir a perpetuar prácticas que perjudiquen los derechos humanos. Gracias a este tipo de dieta logramos:

1. Tener una alimentación adecuada: Ingerir alimentos variados y de temporada nos dará todos los nutrientes necesarios para mantener nuestro organismo sano.
2. Consumir de forma responsable: Te ayudará a ser un consumidor consciente saber que más de 790 mujeres, hombres y niños en el mundo sufren de hambre crónica, según la FAO. ¡No tires nada de comida a la basura, consume solo lo necesario!
3. Cuidar la biodiversidad: La agricultura extensiva necesaria para elaborar las ingentes cantidades de alimentos ultraprocesados que llenan los supermercados, tiene un impacto brutal en el medio ambiente. Elegir productos de proximidad y del cultivo o ganadería ecológico contrarrestar ese efecto.
4. Respetar a los productores: Los productos que consumimos, además de todos los beneficios anteriores, deben ser más justos. Una alimentación sostenible mejora el acceso al mercado de productores desfavorecidos; además respeta las normas de trabajo infantil y explotación laboral.
5. Reducción de la pobreza: Si elegimos productos de comercio justo para nuestra dieta, contribuiremos al desarrollo social de países y productores. Nuestra alimentación puede contribuir a la reducción de la pobreza. Tenlo presente cada vez que compres alimentos.

¿Qué podemos hacer para tener una alimentación sostenible?

Si te gustaría comenzar a cuidar de tu salud y del medio ambiente con un menú sostenible, queremos ayudarte con estos consejos para llevar una alimentación sostenible. ¡Toma nota!

1. Reduce el consumo de lácteos, carnes y pescados, en general, los productos de origen animal.
2. Apuesta por el consumo de productos de cercanía y de temporada.
3. Elige alimentos de origen ecológico.
4. Adquiere productos a granel, así conseguirás reducir el impacto medioambiental del envasado.
5. Evita desperdiciar los alimentos, compra y cocina solo lo que vayas a consumir. Y, aquello que ya hayas cocinado, resérvalo para otro día.
6. No escojas productos precocinados o ultraprocesados, trata de comer solo alimentos naturales.
7. Apoya el comercio justo.

Como ves, la elección de los productos que nos llevamos a la boca es trascendental a la hora de llevar una alimentación sostenible. Podemos contribuir al desarrollo de comunidades, al cuidado del planeta y a nuestra salud. Haz como en el Cerdanya EcoResort, y pásate a la alimentación saludable. ¡Reduce tu huella en cada comida sostenible!

Publicado originalmente el 5 de julio de 2019, actualizado el 7 de febrero de 2023

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