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La terapia con caballos, también conocida como equinoterapia, ha sido objeto de estudio durante muchos años y, gracias a sus prometedores resultados, es una terapia muy recomendada para tratar algunos problemas de salud físicos y trastornos psicológicos que pueden. Además, al llevarse a cabo en entornos naturales, la terapia con caballos favorece la relajación y el disfrute del entorno natural.
¿Te interesa saber más sobre esta terapia, sus beneficios y modalidades? Te lo contamos todo en este artículo. ¡Sigue leyendo!
Beneficios de la terapia con caballos
Dado el carácter sociable de los caballos, así como el calor que desprenden y su ritmo de marcha tranquilo, son muchos los beneficios que se han asociado a esta terapia:
- Estimulación física. Montar a caballo proporciona una estimulación física importante para los pacientes, gracias al movimiento rítmico del animal. Este movimiento ayuda a mejorar el equilibrio, la coordinación y la fuerza muscular, lo que es especialmente beneficioso para personas con discapacidades físicas o trastornos del desarrollo. Además, se ha demostrado que el calor que desprende el animal tiene efectos positivos en pacientes con problemas cardiovasculares.
- Estimulación sensorial. La interacción con este animal involucra múltiples sentidos: el tacto (al tocar su piel), el oído (con el sonido de sus cascos al caminar) y el olor. Esta estimulación sensorial es especialmente valiosa en los tratamientos destinados a personas con trastornos del procesamiento sensorial.
- Mejora emocional. La conexión emocional que se establece entre el paciente y el caballo es uno de los aspectos más relevantes de estas terapias. Estos animales destacan por ser muy intuitivos, lo que les permite percibir y responder a las emociones humanas fácilmente. Esta interacción ayuda a los pacientes a desarrollar su confianza, empatía y autoestima. Del mismo modo, este contacto también es efectivo en los tratamientos destinados a reducir el estrés y la ansiedad.
- Estimulación cognitiva. La terapia con caballos también tiene muchos beneficios a nivel cognitivo. Las actividades relacionadas con el cuidado del animal, como cepillarlo, alimentarlo y montarlo, requieren habilidades cognitivas específicas, como la concentración, la planificación y la resolución de problemas. De este modo, esta terapia ha demostrado ser efectiva ante diferentes trastornos del aprendizaje y en los tratamientos de las lesiones cerebrales traumáticas.
Además de todos estos beneficios, las personas que tienen contacto con los caballos suelen ser más conscientes de la importancia del medioambiente y mucho más respetuosas con la naturaleza.
Tipos de terapia con Caballos
Hay varios tipos de terapia con caballos y cada terapeuta seleccionará la que mejor se adapte a las necesidades individuales de cada paciente.
Equitación terapéutica
Esta es la forma más común de terapia con caballos y consiste, básicamente, en montarlos en un entorno abierto y lo más natural posible. Esta modalidad se lleva a cabo bajo la supervisión de un terapeuta especializado y de un entrenador, quién enseña al paciente las técnicas de montura adecuadas.
La equitación terapéutica tiene como ventaja principal la capacidad de adaptarse a las necesidades específicas de cada paciente y se enfoca, básicamente, en el desarrollo de las habilidades físicas, emocionales y cognitivas.
Hipoterapia
La hipoterapia pone su foco en el movimiento del caballo como forma de estimulación física y rehabilitación. Los terapeutas, en este caso, usan el movimiento tridimensional del caballo para mejorar el tono muscular, la postura y la coordinación del paciente.
Terapia asistida con caballos
Esta forma de terapia se basa en la interacción entre el paciente y el caballo en el suelo; es decir, sin llegar a montarlo. En este caso, el paciente participa en las actividades relacionadas con el cuidado del caballo y se busca establecer una conexión emocional entre ellos.
Esta modalidad de terapia se utiliza, especialmente, para mejorar la comunicación, la confianza y las habilidades sociales de los pacientes, por lo que se trata de la más utilizada ante los trastornos de aprendizaje.
Volteo terapéutico
El objetivo de esta técnica es aprovechar la interacción con el caballo para mejorar el equilibrio, la coordinación, la conciencia corporal y la confianza en el paciente. Del mismo modo, también se pretende facilitar la exploración emocional y el desarrollo de habilidades de comunicación no verbal.
Equinoterapia social
La equinoterapia social se centra en establecer un vínculo afectivo entre el caballo y el paciente. Esta relación permite a los pacientes superar conflictos de adaptación a la sociedad y mejora sus habilidades sociales.
Terapias ecuestres ocupacionales
Las terapias ecuestres ocupacionales se centran en la inserción laboral de las personas discapacitadas. En este caso, no solamente se enseña todo lo relacionado con el medioambiente y el cuidado de los animales, sino que también se trabaja en las habilidades esenciales: autocontrol, gestión de las emociones, comunicación verbal y no verbal, etc.
La terapia con caballos es una forma efectiva de terapia asistida por animales que ofrece una amplia gama de beneficios, tanto físicos como emocionales y cognitivos. Al haber varias modalidades, esta terapia se adapta fácilmente a las necesidades individuales de cada paciente, por lo que son muchos los problemas de salud que pueden ser tratados con ella.
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